2004 - 2018
Guapísimas -2004-2018 -
Buscando a un tejedor de cestas viajé al sur del Territorio Federal Amazonas en Venezuela. Durante estos viajes pude registrar un video documental de la vida y costumbres de algunos pueblos de las étnias Piapoco, Curripaco, Panare, Guahibo y Yekuana que viven en la periferia de la ciudad fronteriza de Puerto Ayacucho, quienes gracias a los medios de comunicación, y la ropa que las organizaciones de ayuda humanitaria distribuye, han tejido una relación muy particular con los signos de reconocimiento social del mundo industrializado, estos iíconos que son las marcas.
De BMW a Chanel, incluyendo Coca Cola y Hello Kitty, los indígenas del estado Amazonas comparten los logos y a los héroes de nuestra civilización.
Guapísimas, 2004-2018 es una serie de mas de 150 wapas y manares -cestas indígenas para el transporte de frutas y producción de casabe- intervenidas, algunas por los propios artesanos bajo mi dirección y otras pintadas y bordadas a mano por mi, con diseños y logotipos de marcas de lujo y consumo masivo. La instalación viene acompañada de un video documental que registra este intercambio cultural. Guapísimas es la identificación del sincretismo, es un testimonio de la fusión de culturas a través del intercambio de mensajes comerciales.
Latin America Art Sales -Philips - New York - 2012
"In the work Guapísimas, Venezuelan artist Pepe López beckons his audience to confront the reality of global consumerism through cultural codes of society. By painting recognizable logos on traditional Venezuelan baskets, López utilizes marketing strategies to illuminate the realities of global production, connecting a commercial image with its forgotten origin. These baskets, symbols of Venezuelan culture that are traditionally used to carry food, have been stripped of their customary function to become the very product of consumption, ultimately engaging in the global trade itself. By using traditional materials and pigments, López not only displaces the labels of major fashion houses and images of pop culture, but he also transforms these simple objects into allegorical representations of his very protestation"
Consuming Cultures, a global view -21c Museum Kentucky - 2012
As our global village grows increasingly interconnected, which cultural traditions are preserved, lost, or transformed? 21c Museum has organized a group exhibition for Proof on Main featuring artists from North and South America, Europe, and Asia, who examine, with both whimsy and wonder, the evolution of aesthetic and material values in a world of rapid change and mass consumption.
Brand names and logos also appear in works by Ye Hongxing and Pepe Lopez.
Ye combines elements of Western painting with Chinese porcelain decorative patterns in her Fusion series, which the artist describes as a reaction to the “swift change in China’s social system.” Referencing rapid industrialization and attendant consumerism, Ye juxtaposes mass-produced, garishly colored stickers with painterly portraits and images of the Buddha, illustrating the contrasts between material and spiritual values in contemporary China. The Playboy bunny, Superman, Louis Vuitton, the Nike logo, the interlocking symbol of yin and yang are among the prolific visual encylopedia of Pepe Lopez’s Guapisimas. In Lopez’s native Venezuela, these hand-woven food baskets were traditionally decorated by men as wedding gifts to their brides; their designs reflected indigenous aesthetics as well as family names and symbols. As the tourist trade has expanded, designs have changed to appeal to a broader, tourist-driven market in which recognizable logos are often valued more highly than a personal, unique iconography. Lopez’s work—the title of which is “gorgeous”—charts the cultural erasure that often follows the expansive reach of global economics.
Centre National d'Arts Plastiques - Paris - 2005-
Les wapas sont de grands paniers ronds et presque plats tissés par les Indiens Piapoco, Curripaco, Panare, Piaroa, Guahibo et Yekuna de l’Amazonie. En 2004, Pepe López part pour le sud du Vénézuéla à la recherche d’une culture qui aurait échappé à la mondialisation. A sa grande surprise, il rencontre un peuple qui, à travers les vêtements et les objets usagés que l’aide humanitaire distribue, a tissé (c’est le cas de le dire), une relation toute particulière avec les signes de reconnaissance sociale du monde industrialisé, ces icônes que sont les marques. De BMW à Gap, en passant par Hello Kitty et Pikachu, les indigènes de l’Etat de l’Amazonie se sont appropriés les logos et les héros du monde occidental. Avec son film et son installation Guapísimas, Pepe López témoigne de cette invasion «culturelle» et de ses répercussions sur l’art traditionnel. Il utilise comme support les Wapas : des paniers qui, comme tous les paniers du monde, servent à transporter des provisions, des marchandises et des objets. Au contact de notre civilisation et de ses produits, l’artisanat indigène a changé, il s’est mondialisé. Guapísimas est l’identification du syncrétisme, la fusion de deux cultures recomposées avec un sens aigu et esthétique. Guapísimas est la cosmogonie d’une transformation.
Guapísimas, un proyecto de Pepe López - María José Balcells
La creciente demanda de artesanía provocada por el aumento del turismo de masas, ha supuesto un cambio radical tanto en los usos como en los materiales utilizados para la producción de este tipo de objetos realizados por los indígenas. Así por ejemplo la guapa y el manare, tipologías de la cestería tradicional venezolana, eran utilizados habitualmente para colocar tortas de casabe y todo tipo de alimentos secos o para colar y cernir la harina de yuca amarga. Los indios Guahibos, Ye’kuana y Yanomami, entre otros, tejían estas cestas con fibras de tirite o con chiquichique, decorándolas con dibujos cargados de simbolismo y vinculados, en muchas ocasiones, a la vida sagrada.
Las guapas eran tejidas por hombres casaderos quienes se las ofrecían a sus futuras mujeres. De esta forma las cestas dejaban de ser únicamente un útil para convertirse en un elemento narrativo y expresivo de la creatividad y destreza de aquel que las realizaba. La belleza y perfección de estos objetos los han convertido en piezas muy solicitadas por los turistas para quienes la guapa y el manare se transforman en un puro elemento decorativo, en un souvenir más que llevar a su país de origen
Pepe López (Caracas, 1966), como si de un indio se tratara, pinta una novedosa colección de guapas y manares de los indios guahibos : las “Guapísimas”. La artesanía deviene moda y como tal, las nuevas guapas y manares dejan atrás símbolos y mitos aborígenes para sustituirlos por otros que las actualicen: las imágenes de Valentino, Gucci, Louis Vuiton o el cocodrilo de Lacoste se convierten en los nuevos motivos decorativos. Se trata de piezas para el mercado globalizado en el que nos hallamos sumergidos. Las dieciséis cestas que constituyen esta instalación han sido pintadas por duplicado; la primera colección es para exposición y la segunda para ser devuelta a los indios, quienes tejerán los logotipos de la industria de la moda con las fibras y los pigmentos tradicionales.
Las Guapísimas son, al igual que sus antecesoras, una muestra de la sensibilidad y destreza del artista a la vez que un relato tejido. En este caso López nos narra mitos de la sociedad contemporánea y nos demuestra, tal como afirma la antropóloga venezolana Lelia Delgado, que la cultura material de un pueblo no es otra cosa que el reflejo de su vida social.
Guapísimas de Pepe López - Federica Palomero
La instalación de Pepe López, Guapísimas, es parte de la reflexión, expresada en sus trabajos recientes, sobre las relaciones entre el poder y el consumo. En esta obra especifica, su discurso se fundamenta en la insólita y algo surrealista alianza entre la cestería tradicional de los indígenas venezolanos y los logotipos de marcas de diseños de moda, símbolos de status social y económico en la civilización occidental. El artista trabaja a partir de la perdida, el cruce y la recuperación de sentidos a través de la unión de elementos culturales aparentemente muy disociados, pero indudablemente ligados por su relación con los bienes materiales.
Estas cestas planas, que usa aquí Pepe López, llamadas Guapas por los indígenas, pertenecen a los Guahibos y Yekuanas. Las tejen los hombres para regalarlas a la mujer con quien van a casarse. Ponen toda su destreza en la perfección del tejido y la belleza de los diseños geométricos referidos a los códigos estéticos de la comunidad, interpretados por cada hombre casadero para crear una especie de heráldica personal, que se vuelve también social, ya que estos diseños identifican a cada familia y a sus propiedades.
Estos objetos utilitarios –permiten guardar alimentos- son también prendas de amor y senas de identificación.
Desliz de sentido: Ahora los indígenas producen las cestas para consumo externo. Esta comercialización les permite obtener recursos para comprar objetos que no fabrican, que no son parte de su cultura, pero que van integrando como una manera de tener acceso a ciertas comodidades de la sociedad moderna: motores para sus botes, utensilios de cocina, medicinas…Al penetrar los circuitos de comercialización, estos objetos pierden su valor material de uso y su significado simbólico y se vuelven para sus compradores piezas decorativas y souvenir “exóticos”. En vista de que actualmente este mercado esta prácticamente copado, los artesanos indígenas se han visto en la obligación de tejer los objetos y diseños mas solicitados, y no los de su propia comunidad. Es así como se ha instituido una especie de micro-globalización, bajo la presión del mercado. Se reproduce a su escala la dinámica que rige el comercio internacional.
Pepe López relaciona este fenómeno con el de las marcas de lujo. En este punto es donde se produce el cruce de sentido: Las empresas que las producen empezaron siendo negocios familiares de artesanos muy sofisticados y terminaron siendo globalizadas e imitadas por fabricantes “piratas”; entre sus consumidores y también para los que no tienen acceso a ellas, se han transformado en un símbolo de posición social, y así es como se han venido creando verdaderas “tribus urbanas” cuyos miembros se reconocen entre si a través del uso de marcas, cuyos logotipos ya están a la vista en la parte externa de cada vestimenta o accesorio, transformando a sus usuarios en paneles publicitarios andantes.
Al unir ambos fenómenos –el de la cultura indígena que se aleja de sus raíces para integrarse al comercio y el de marcas a través de las cuales, dentro de la globalización, se busca una identidad- Pepe López, llega dentro de su obra, a una recuperación de sentido. Así como los turistas se proveen con objetos ajenos a su civilización, los indígenas pueden fabricar cestas cuyos diseños no significan nada para ellos. Por una parte, los sentidos simbólicos se diluyen a favor del mercado; por otra, el mercado se apoya en el uso de productos que permiten construir una identificación.